El pasado 18 de octubre, día de la madre, amaneció Tucumán con la triste noticia de la desaparición de dos nenas, una de 9 años y otra de 2 años curiosamente con el mismo nombre Abigail.
Las dos vivían en Barrios de extrema necesidad en la periferia del conurbano de la ciudad capital de la provincia, San Miguel de Tucumán.
Las familias y vecinos comenzaron un operativo autoorganizado de búsqueda ante la negativa por parte de la policía de la provincia de brindarles apoyo. Y esta situación es una lógica perversa que se sostiene desde la última dictadura militar puesto que la práctica de la desaparición de personas no terminó nunca en esta provincia desde el operativo independencia del año 1975 y se mantiene gracias a la impunidad de la clase dominante oligárquica con poderes de señor feudal que domina esta provincia a través de los partidos burgueses tradicionales entre los que tenemos la triste realidad de también convivir bajo esta hipócrita democracia burguesa con el único partido de ideología fascista organizado y con capacidad de gobierno de toda la Argentina concretada con el gobierno del genocida Antonio Domingo Bussi en los años noventa y cuyo aparato todavía sigue íntegro con su hijo y casi el 25% de la legislatura provincial.
Y este dato no es menor puesto que durante horas de la tarde del domingo 18 de octubre (¡justo el día de la madre!) primero apareció la nena de 2 años llevada por su padrastro a un policlínico ya sin vida y con la denuncia de su madre biológica de que había sido violada por éste, su pareja actual y asesinada por asfixia. El asesino, es un conocido narco de esa Villa y también puntero político del partido de Bussi. Luego en horas de la tarde los vecinos de Villa Muñecas encontraron el cadáver sin vida de la otra Abigail de 9 años descuartizada en un canal de la zona norte de la ciudad. En el mientras tanto, ni la policía ni el gobierno de la provincia, y mucho menos la corrupta justicia provincial, hicieron nada para tratar de encontrar a las dos nenas.
Al día siguiente y luego del velorio de las dos pequeñas los vecinos decidieron, junto a diversas organizaciones sociales y feministas, organizar una marcha frente a la Casa de Gobierno a pesar de las restricciones impuestas por el drama de la infección por covid-19. El gobierno de la provincia salió a defender a la policía diciendo públicamente que estaba saturada por el control de la pandemia. En otras palabras, legitimando el accionar de la policía y de la Justicia del abandono de persona que es costumbre ante cada hecho de desaparición que se sufre por estos lugares. Famosos son los casos que lograron trascender las fronteras provinciales como el de Marita Verón o el de Paulina Lebbos, pero son muchas más, cómo se puede ver en cada marcha de cada martes en la Plaza Independencia plaza central de la ciudad de Tucumán, donde tristemente puede verse la bandera con cada vez más caras de víctimas varones y mujeres, trans y lesbianas, niñas y niños desaparecidos y asesinados impunemente por el accionar de las bandas narcos que trabajan para la policía y el gobierno, como así también por la propia policía, sin que nadie haya ido preso en más de 35 años.
Pero esta vez las cosas cambiarían, puesto que el hartazgo provocó un punto de inflexión, qué cambió la pasividad con la cual muchos organismos y organizaciones sociales abordan estos temas: fueron los mismos vecinos de esas Villas los que decidieron autoorganizarse y comenzar a buscar al asesino de la nena de nueve años puesto que el otro asesino femicida padrastro de la nena de dos años quedó bajo la cobertura de la policía ante un intento de linchamiento y de incendio de la comisaría donde se encontraba detenido. Pero el segundo femicida violador de apodo «el culón», continuaba prófugo gracias a la ayuda -cómo se pudo saber después- de los matones fascistas del partido de Bussi. Fue precisamente una vecina de ese mismo barrio, qué es la querellante y denunciante de que fue violada por el propio Bussi, la que aportó el dato de que eran estos matones los que estaban protegiendo y ocultando al femicida.
El gobierno de la provincia perteneciente al partido justicialista y con un romance eterno con los fascistas con los que co-gobierna la provincia, prontamente salieron también en la campaña por tratar de desmovilizar a los vecinos autoorganizados, haciendo la parodia junto a la cuestionada justicia tucumana y la policía, de una especie de rastrillaje operativo conjunto en la otra punta de la ciudad. Los vecinos indignados por esta muy evidente cobertura para tratar de proteger al asesino y a sus padrinos políticos, el día 21 por la tarde, iniciaron una cadena de mensajes y de rastreo a través de los datos de WhatsApp y la solidaridad de toda la población tucumana que comenzó a aportar indicios certeros de donde estaba el femicida, y una vez que dieron con el paradero donde se escondía se movilizaron hacia la zona, quemaron las casas de los que lo protegían y decidieron hacer justicia por mano propia, linchando al femicida, el cual murió horas más tarde cuando llegó la policía a intentar salvarlo.
Este hecho conmocionó a toda la población Tucumán a quien inmediatamente salió apoyar a los vecinos, al ver que el gobierno redoblaba la apuesta con la amenaza de encarcelar a cada uno de los partícipes del linchamiento. Inmediatamente una pueblada se puso en marcha con cortes en cada una de las entradas de cada uno de los barrios y piquetes de autodefensa contra la policía y el gobierno de la provincia.
Este proceso todavía continúa y nos deja una inmensa enseñanza de que cuando los trabajadores sienten una justa indignación ante la injusticia y se organizan y organizan también su autodefendensa se constituyen en una fuerza difícil de parar y es la demostración efectiva de que nosotros mismos, los trabajadores y el pueblo pobre somos los únicos dispuestos a hacer justicia contra los criminales amparados por el corrupto poder político y policial. Los trabajadores con conciencia de clase deben participar activamente en apuntalar este tipo de organizaciones, dándole continuidad orgánica para que como fenómeno espontaneo no se disuelva. Discutiendo un programa para que esa organización comience a enfrentar más de conjunto al régimen burgués y de esa manera transformarse en la demostración efectiva de que nosotros mismos nos podemos gobernar y que para ello esa experiencia debe aportar a la construcción de un Partido Revolucionario que organice la lucha para terminar de una vez por todas con estos gobiernos de patrones promotores de la desaparición la violación y los femicidios disfrazados de la asquerosa figura legal burguesa de infanticidio, para tapar lo que es en realidad la demostración más clara de la opresión brutal que ejerce el machismo patriarcal del capitalismo en putrefacción.
Sigamos este ejemplo para que las dos Abigail no hayan muerto en vano.
Alma Guevara y Máximo Four. Tucumán. 23/10/2020